El Harte

El harte catártico antártico egótico
alivio para eguitos doloridos
es un modo de que otros sepan lo ocurrentes
diferentes estridentes excelentes que somos
cómo volamos de metáfora en metáfora en el vuelo de nuestra visión subjetivista
y a la vez tan ecléctica eléctrica diacrónica sincrónica
posmoderna
de corte netamente
vanguardista
cómo nuestros rollos personales se desenrrollan a la enésima potencia.
Ya la gente está harta del harte y su violencia
de algodón en los oídos
acumulada en galerías de hartazgo
pero no nos importa
queremos estar en las bienales, en los museos, en los festivales
alguien debe reflejar
que todo está mal
pero que es divertido
o al menos bello...
muchos adoran revolcarse en el lodo hartístico
heurístico anticrístico alienístico
y hay una inmensa mayoría a la cual nuestros mambos
no le interesan en lo más mínimo
El harte sirve básicamente para que lo conocido siga desconociéndose
es un juego de aproximación
por eso, conscientes de nuestra alta misión
seguiremos haciendo
seguiremos helando
desconectados de todo lo que no sea
nuestra necesidad hartística y hartante de expresión
para perpetuar la ilusión
de la separación
donde unos hartan, otros compran, y otros, con suerte, miran
y cuando así se indica
aplauden
aplauden
aplauden
mientras alguien susurra
que el Harte identifica a los egos perdidos
pero el Arte resuena
en los oídos
del corazón
sin razón
borrando el tiempo.